Ha nacido un nuevo actor en el mundo de los yates de alta gama. Con base en Miami Beach y raíces internacionales, Manari Yachts está redefiniendo el yate como refugio privado y lugar de experiencias inolvidables. El primer capítulo es el Manari 52, un dayboat mediterráneo que marca el inicio de una gama destinada a crecer.
En el corazón de Manari Yachts subyace una idea sencilla: un yate no es sólo un medio de transporte, sino un destino flotante, un santuario privado y un escenario para momentos inolvidables. Como explica Albert Franko, fundador y director general de Manari Yachts, “no se trata de reinterpretar el pasado, sino de definir lo que debe significar hoy y mañana el lujo sobre el agua”.
El primer capítulo: Manari 52
El modelo inaugural es el Manari 52, un dayboat mediterráneo que combina líneas esculpidas, detalles refinados y un rendimiento sin concesiones. Con características poco comunes en su categoría, como un balcón lateral desplegable y una plataforma de popa ampliada, el 52 está diseñado para acercar a los propietarios al mar de una forma más directa e íntima.
“Con Manari no sólo estamos diseñando yates, estamos dando forma a una marca que representa la libertad, el rendimiento y el estilo de vida. El 52 es sólo el principio de una serie que inspirará a una nueva generación de entusiastas”, afirma Fatih Sürekli, Director General de Red Yacht Design.
Rendimiento sin concesiones
Propulsado por dos motores Volvo Penta IPS, el Manari 52 alcanza los 47 nudos al tiempo que garantiza maniobrabilidad y confort de crucero. “Hemos desarrollado un casco muy eficiente, capaz de combinar velocidad, estabilidad y ahorro de combustible”, explica Bas Mulder, Arquitecto Naval de Mulder Design. “El resultado es un equilibrio perfecto entre rendimiento y confort, que establece un nuevo estándar para un dayboat de 52 pies”.
Precisión técnica y confort natural
El diseño se confió a Eureka Yachts, que concibió el Manari 52 como una arquitectura unificada: desde la disposición de los sistemas hasta los equipos y accesorios de a bordo, todo se ha integrado con precisión milimétrica. “El resultado es un confort excelente y un rendimiento siempre equilibrado”, señala Sadik Ozum, director técnico del proyecto.
Manari Yachts, una marca global
Con sede en Miami Beach, una fuerte presencia europea en Saint-Tropez y Palma, y una base en Hong Kong, Manari Yachts ya ha construido una red internacional. El objetivo de Manari no es sólo competir, sino dar forma a una nueva visión del lujo sobre el agua. El 52 es sólo el primer paso. En 2026 se lanzará un modelo más pequeño, rápido y refinado, mientras que ya se están desarrollando versiones más grandes, que llevarán a la marca al mundo de los superyates. Cada nuevo modelo mantendrá el mismo ADN de arquitectura esculpida, generosos espacios sociales y meticulosa artesanía, con una producción limitada y un estilo que refleje la personalidad única de su propietario.