Aquila 42 Coupe, la prueba en vídeo: elegancia de yate, prestaciones de lancha rápida, comodidad de catamarán

Aquila 42 Coupe Prueba de mar

Al salir del puerto de Génova, nos encontramos inmediatamente con un mar picado. Nada extremo, pero suficiente para poner a prueba a cualquier embarcación.
Empezamos al ralentí, a 700 rpm, haciendo 4,5 nudos con un consumo instantáneo de combustible de 0,89 galones por hora. Es un ritmo de desplazamiento tranquilo, pero está claro que el Aquila 42 no está hecho para permanecer ahí mucho tiempo.

Empujamos los aceleradores hacia delante. A 12 nudos, el casco empieza a levantarse ligeramente y la estela se estira: ya estamos en modo semiplaneo. Sin mucho esfuerzo adicional, el barco acelera suavemente hasta los 18 nudos, y es entonces cuando entra en juego el foil. No es un foil “volador” como los de los monocascos de competición, sino una pala hidrodinámica que genera sustentación, aligerando el casco casi la mitad de su peso. El resultado es una navegación excepcionalmente suave que permanece fluida y silenciosa incluso con mar de proa. Podemos sentir la diferencia: la embarcación se desliza sobre el agua en lugar de atravesarla. A 20 nudos, aún contra las olas, el consumo medio de combustible se sitúa en torno a 1,06 galones por milla náutica, una cifra impresionante para un barco de este tamaño y potencia, prueba de que la eficiencia del foil y la distribución del volumen del casco funcionan en perfecta armonía.

Aceleramos de nuevo. Las mariposas avanzan y los dos Volvo D6 responden con prontitud. El Aquila 42 Coupe acelera con entusiasmo, sin mostrar el menor signo de esfuerzo. Los instrumentos suben: 37 nudos, luego 40, alcanzando un máximo de 41,3 nudos a plena carga, todavía contra el mar. Incluso a estas velocidades, el manejo se mantiene estable y el confort a bordo nunca se ve comprometido. Aquí es donde realmente apreciamos la diferencia de un catamarán bien diseñado: los cascos gemelos cortan el agua con una resistencia mínima, mientras que el foil mantiene la plataforma de cubierta casi perfectamente nivelada.

Reducimos la velocidad para encontrar la velocidad de crucero ideal. A 30 nudos y 2.800 rpm, el barco se mueve con el mar a babor, y el consumo de combustible baja a sólo 0,82 galones por milla náutica. Bajando a 25 nudos, la cifra mejora aún más: 0,76 galones por milla a 2.500 rpm. Cifras como éstas son sencillamente excepcionales para esta clase de embarcación. La razón está clara: a estas velocidades, el foil funciona a su máxima eficiencia, elevando progresivamente el casco y reduciendo la superficie mojada. El resultado es una navegación más rápida, ligera y económica, con la sensación en el timón de una embarcación deportiva y no de un catamarán de 42 pies.

Decidimos probar la maniobrabilidad. A 30 nudos, todo a estribor: el Aquila 42 dibuja un círculo de unos 30 metros de diámetro. Giramos en sentido contrario, a babor, y la respuesta es la misma. La dirección sigue siendo precisa, la escora es mínima y el trimado se mantiene perfecto incluso en giros cerrados. Cualquiera que piense que los catamaranes no son ágiles cambiará de opinión tras unos minutos al timón de esta embarcación.

Volvemos a reducir la velocidad. A 20 nudos, el Aquila 42 se desliza suavemente sobre el agua, casi sin vibraciones. El foil sigue haciendo su trabajo incluso a velocidades medias y bajas, dando la sensación de un yate mucho más grande, estable y sólido. Esto hace que navegar sea fácil y cómodo, incluso para quienes tienen poca experiencia en catamaranes.

Nuestras mediciones cuentan una historia clara. A 700 rpm, la velocidad es de 4,5 nudos con un consumo de combustible de 0,89 galones por hora. A 2.500 rpm, el barco hace 25 nudos con un consumo de 0,76 galones por milla, y a 2.800 rpm, alcanza los 30 nudos con un gasto de 0,82 galones por milla. A plena potencia, 41,3 nudos, el catamarán mantiene una compostura impecable. Estas cifras apuntan a una única verdad: la eficiencia aquí no es sólo un concepto, es una realidad tangible. Y con un total de 880 caballos de potencia, alcanzar aproximadamente 0,79 galones por milla a 25 nudos es poco menos que extraordinario.

Aquila 42 Coupe – Datos de la prueba

El barco en detalle

El Aquila 42 Coupe mide 12,64 metros de eslora y 6,44 metros de manga, proporciones que garantizan no sólo estabilidad, sino también una habitabilidad excepcional. El diseño es fruto de la colaboración internacional entre VPLP Design, uno de los mejores estudios de diseño de catamaranes del mundo, y el equipo de ingeniería de Aquila Power Catamarans. El resultado es una embarcación que combina líneas modernas, superficies limpias y verdadera funcionalidad.

En cuanto subes a bordo desde la plataforma de popa, la sensación de espacio es impresionante. La bañera es enorme, una de las características definitorias de los multicascos. El propietario puede elegir entre distintas distribuciones: en el barco de pruebas había dos grandes tumbonas, pero también existe la opción de un sofá en forma de U con una mesa central para comer al aire libre o tomar una copa al atardecer. A babor, la bañera alberga una barbacoa y una nevera, perfectamente integradas y de fácil acceso.

Delante, el puesto de gobierno ocupa el centro del escenario. Dos asientos ergonómicos ofrecen un control perfecto, mientras que la chaise longue lateral se convierte en uno de los lugares más codiciados durante la navegación. Tras el parabrisas panorámico, la visibilidad es excelente en todas direcciones, y la instrumentación es moderna e intuitiva. En cubierta, la zona de proa refleja a la perfección el estilo americano que define la gama Aquila: cuatro asientos orientados hacia delante que pueden convertirse en tumbonas adicionales, ofreciendo seguridad y comodidad durante el crucero.

Bajo cubierta, los espacios interiores son sorprendentemente generosos para esta categoría. Una gran dinette climatizada, con una mesa plegable con capacidad para ocho personas, recibe a los invitados en un ambiente luminoso y aireado. La cocina, a babor, está dispuesta como la de un yate pequeño: frigorífico de altura completa, microondas, generoso espacio de encimera y mucho espacio de almacenamiento, ideal para cruceros largos. Cada casco alberga un camarote doble con cama de matrimonio, cuarto de baño privado y una gran ducha separada. La privacidad es total, gracias a la separación natural de los dos cascos. La calidad de los acabados y materiales es alta, con superficies claras, maderas satinadas y detalles de acero inoxidable que transmiten una sensación de solidez y elegancia moderna.

Aquila 42 Coupe – Especificaciones técnicas